En fin, esta es la historia de dos mujeres y un edén. Dos mujeres de un extraordinario valor y coraje que un día se encontraron y montaron su propio paraíso en la tierra. El lugar del que hablo es “El paraíso del cuento”. Pero vayamos al principio de esta pequeña fábula pues nos interesan los orígenes.
Míriam Díez Veza, estudió derecho en Alicante. Durante años desarrolló un trabajo monótono y poco creativo en una sucursal bancaria . Una mañana al levantarse, descubre que lo que ella realmente quiere es vibrar con su trabajo, así que decide sin rodeos abandonar su actual vida y partir hacia las desconocidas tierras, al más puro estilo tradicional del juglar, de la narración oral y vivir en el mundo del cuento.
Mientras, en alguna otra parte, encontramos a Begoña Monllor, maestra de infantil en algún colegio de alguna parte. Esa misma mañana, casualmente, le ocurre algo parecido y decide que también le encanta el mundo de la narración y que quiere viajar como el viento por todas partes difundiendo las más bellas historias jamás contadas.
Así pues nuestras dos protagonistas se encuentran en un punto común de algún lugar,ambas con el mismo propósito y se ponen manos a la obra. El paraíso del cuento es el resultado de esta breve aunque bellísima historia.
Y érase también todas las actividades organizadas por el Paraíso del cuento en centros escolares, casas de cultura, bibliotecas, museos y en colaboración con diferentes Instituciones y Organizaciones.
Nuestros proyectos se diferencian por sus objetivos y valores educativos.
Nuestra intención en las sesiones es de interacción con el público, activa, lúdica y participativa.
Nuestros objetivos van desde la animación lectora hasta la coeducación, pasando por el desarrollo de la imaginación, la sanación a través del cuento, y un largo etcétera.
Desarrollamos sesiones a medida en función de todas las necesidades.
Trabajamos en todos los rincones donde se requiera una educación divertida.